Isabel Villaseñor

Nació el 18 de mayo de 1909 en Guadalajara, Jalisco. En 1929, en la Ciudad de México, estudió grabado en el Centro Popular de Pintura "Santiago Rebull", dirigido por Gabriel Fernández Ledesma, con quien después contrajo matrimonio. Fue compositora y ejecutante de corridos, actividad que combinaba con sus trabajos de grabado en madera y en metal donde la síntesis del dibujo revela conocimiento del efecto compositivo y los valores de la línea.

En 1931 se desempeñó como maestra rural misionera en el estado de Hidalgo. Ese año presentó su primera exposición individual en la Biblioteca Nacional de México y participó como protagonista en la película inconclusa ¡Qué viva México!, de Eisenstein (1931).

En esos años, Isabel Villaseñor expone con el grupo ¡30-30!, pinta un mural en una escuela de pueblo en Hidalgo. En 1934 muere su primer hijo. Esta tragedia repercute en la obra: deja el grabado en madera por la impresión en vidrio o monotipo, se obsesiona por el tema de la maternidad y dibuja figuras sin rostro. Desde entonces, la obra refleja la ausencia y el vacío hasta agotarse. Isabel se va retirando, sólo escribe letras de corridos para sus amigos y pinta una que otra acuarela o piroxilina (el secreto) y tiene a su hija Olinca.

Murió de un ataque al corazón en la Ciudad de México el 13 de marzo de 1953.

http://www.aceroarte.com/coleccion/Isabel_Villasenor_oaxaquena.htm

Autorretrato (1929)

Grabado

El Corrido

Grabado

Mestiza de Tahmek (1952)

Piroxina sobre masonite

71 x 61 cm.

Oaxaqueña

Litografia sobre piedra litografica

34 x 28 cm.

Retrato (1953)

Terracota

48 x 62 x 28 cm.

Tehuana con sandia (1952)

Óleo sobre tela

130 x 111 cm.

Isabel Villaseñor

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